La muestra se podrá visitar del 15 de diciembre al 30 de enero de 2018

La Galería de Arte Marmurán abre este viernes la exposición "Evocando a Biosca"

Este viernes 15 de diciembre, a las 20:00 horas en la Galería de Arte Marmurán (Calle Castellanos 37, de Alcázar de San Juan - Ciudad Real) se procederá a la inauguración de la exposición "Evocando a Biosca".

La muestra es un pequeño homenaje a la emblemática Galería Biosca, cuando se cumplen veinte años de su clausura.

Esta exposición recoge una  notable muestra de los autores de dicha galería, en total son 16 obras, de las cuales hay grandes obras como "San Bernardo, 80" óleo/tabla de Amalia Avia 73x60 cm. cuadro que representa la portería del edificio donde vivieron Amalia Avia y Lucio Muñoz, "Paris" de Francisco Farreras óleo/lienzo  de 1953 de su viaje a la capital francesa, de José Hernández un cuadro con generosas medidas óleo/lienzo de 130x162 con personaje característico de sus obras, la "Plaza de Toros de Briviesca" es el cuadro de Agustín Redondela, un óleo/tabla "Paisaje Griego" de Gregorio Prieto, "El sueño en el Árbol" de Juan Romero, "Callejón" óleo/tabla de Carlos Morago, "Sin título" Técnica Mixta sobre tabla de Pepe Díaz de su etapa parisina de 1960, "Cabeza soñadora" de Margarita Gámez, etc. Son algunas de las obras que podemos contemplar en dicha exposición.

Texto de Amador Palacios sobre la exposición

En los años posteriores a la Revolución de los Claveles, se decía que la Fundación Goulbenkian de Lisboa era representativamente el Ministerio de Cultura portugués. No se puede afirmar lo mismo de la Galería Biosca, una venturosa iniciativa de Aurelio Biosca, pero sí asegurar, como escriben Javier Tusell y Álvaro Martínez-Novillo, que las galerías de arte, en los aciagos años de la dictadura de Franco, considerando que Biosca fue la de más continuidad en el periodo, “juegan un papel decisivo no sólo como instrumento de comercialización sino también de difusión de los valores estéticos”. Valores que Biosca aglutinó ejemplarmente.

El arte plástico español acaecido en la época franquista difirió un tanto del arte literario desarrollado en esas décadas. Sobre todo por sus condicionantes. Salvo la escritura de corte oficial, la literatura era producida mayormente por la oposición al régimen, doblegada a las actitudes comunistas. Así, el PCE imponía un realismo afín al impuesto por el estalinismo soviético, obligando al carácter de la novelística española, mientras que la poesía, menos determinante, se dejaba al cuidado, orientándose a una expresión testimonial, del crítico José María Castellet. De modo que bastante de esa narrativa, y también de esa poética coetánea, hoy nos resultan algo desfasadas. A los rebeldes que quisieron seguir el camino de la vanguardia, se les notaba demasiado su empeño vanguardista aflorado en cierta alevosía.

Sin embargo, la pintura, o la escultura, acatando también, por parte de un gran porcentaje de sus creadores, un realismo inevitable frente a las circunstancias sociológicas, optó oportunamente por un realismo mágico, que aun siendo realismo se cimienta en la innovación sorpresiva y antidogmática. Algunos artistas de esta muestra se ejercitaron en la experiencia vanguardista, como Gregorio Prieto o Antonio Fernández Molina, mientras que otros evolucionaron a una minimalista visión de la realidad (caso de Juan Alcalde), rozando la aplicación de su realismo una equívoca, sugerente y razonada abstracción (Francisco Farreras). Destaca en esta exposición el genuino realismo mágico, etiquétese como se quiera, demostrado por destacados artífices: Agustín Redondela, Amalia Avia, Antonio López, Carlos Morago, Agustín Úbeda…

En esta afortunada ocasión, gracias a la pericia y sensibilidad del galerista Ángel Maroto, tenemos a la vista un muy grácil compendio, amable prontuario de la historia del arte español sobrevenido en unos tiempos de erizadas dificultades. Esta ventajosa colección, que ahora se nos hace presente, engrandece sobremanera a los artistas aquí reunidos que atesoraron el gran mérito de fijar soluciones en medio de arduas circunstancias que la Historia evocará  resaltando el imperecedero quehacer de estos grandes artistas.