Pedro Casas: "No queda más remedio que trabajar y mirar al futuro con optimismo"
El año 2020 está siendo un ejercicio complicado y diferente para todos los municipios. Un año, marcado por el coronavirus y por la crisis social y económica; un año difícil para los vecinos pero también para los Ayuntamientos, encargados de adaptarse a la pandemia sin dejar de prestar los distintos servicios municipales.
En ese contexto, Ayuntamientos como el de Miguel Esteban siguen abriendo sus puertas y poniendo cada día en marcha sus distintos servicios desde la cautela y la responsabilidad, atendiendo a las pautas de Sanidad, pero mirando al futuro con optimismo. Su alcalde, Pedro Casas, para quien el primer objetivo son las personas, nos explica en la siguiente entrevista cómo su administración viene adaptándose a la nueva realidad y en qué medida se están viendo afectados sus vecinos por el coronavirus.
PREGUNTA. ¿Cuál es la situación actual de Miguel Esteban en relación al Covid19?
RESPUESTA. Sobre el virus y la pandemia hemos vivido momentos mejores y peores… Al principio, en marzo y abril no tuvimos una situación mala del todo, nuestros índices fueron aceptables, dentro de lo que cabe; pero actualmente andamos en el nivel 2. Hace unas semanas tuvimos un repunte, el virus se volvió más agresivo y
Desde el punto de vista económico, la cosa está bastante difícil. Somos un pueblo agrícola sobre todo, muchas familias dependemos del vino; y aunque la cosecha no ha sido mala, este año hay muchos problemas para colocar el producto, con lo que la economía de muchas familias migueletas se va a ver reducida.
P. ¿Cuál es el ánimo de la población? ¿Qué le transmiten sus vecinos?
R. Los ánimos la verdad están mejor unos días que otros. Como en todos los sitios. La verdad es que la gente en estos momentos no se muestra optimista. En verano nos habíamos recuperado un poco, pero después han vuelto a venir contagios y sigue habiendo mucho escepticismo entre los vecinos, miedo y respeto a un virus que se ha llevado a algunos vecinos y que está siendo malo para las familias.
P. ¿Han tenido muchos fallecidos en el municipio?
R. No sabemos la cifra real de fallecidos por la covid. Durante los meses comprendidos entre marzo y mayo, durante el estado de alarma, murieron unas 20 personas, cuando lo normal está en torno a 10. Calculamos que en esos meses murieron el doble de vecinos de lo normal. Fue cuando el hospital Mancha Centro estuvo saturado y no podían atender a la gente. Algunos vecinos fueron para ingresar y nos los devolvieron a las 48 horas… Afortunadamente, ahora la situación clínica no tiene nada que ver. Tenemos que ser optimistas y ser todos responsables para que no vuelva a pasar aquello, para no retroceder, para seguir haciendo esfuerzos cada día. Es necesario seguir llamando a la responsabilidad individual de la gente, para que este invierno no volvamos a aquellos momentos.
P- ¿Cómo está siendo la crisis para el Ayuntamiento? ¿Ha sido complicado adaptarse a la nueva situación?
R. El Ayuntamiento va recobrando también la normalidad poco a poco, adaptando las instalaciones a lo que indica Sanidad. Después de un tiempo prácticamente cerrado, hemos ido adoptando una serie de medidas, como la separación del personal en despachos o mediante mamparas; con control de temperatura en la entrada para la gente que viene, dispensadores de gel, etc. Hay que tener en cuenta que también entre los trabajadores hemos tenido algún caso, pero una vez superados estamos trabajando con cautela pero casi a pleno rendimiento. Siempre teniendo en cuenta que estamos en el nivel 2 y eso significa, por ejemplo, tener las biblioteca cerrada, la piscina climatizada, el gimnasio, las instalaciones deportivas, etc. Y, en el sector privado, los bares, por ejemplo, a medio funcionamiento.
P. Ha mencionado usted los bares ¿Cómo están actualmente el comercio y las pequeñas empresas del municipio?
R. Sobreviven como van pudiendo. La verdad es los comercios, bares, tiendas y demás pymes están flojos, lo están pasando mal, y por eso tenemos que ayudarles. En Miguel Esteban, hemos puesto en marcha desde el Ayuntamiento una campaña de apoyo al pequeño comercio con incentivos, cheques, regalos, etc. Y a los bares este año no les hemos cobrado la tasa de terrazas… Además, les vamos a devolver la mitad de la basura. Y si es necesario de cara al año seguiremos ayudando con medidas similares.
P. Otro reto ha sido el inicio del curso escolar. ¿Qué tal ha sido en Miguel Esteban?
R. Bueno, dentro de lo que cabe el curso podemos decir que se ha iniciado bien. Hemos trabajado mucho durante el verano para tenerlo todo a punto y que los niños acudan a clase con la mayor seguridad posible, en contacto con los equipos directivos. En general, la situación va poco a poco normalizándose. Hemos tenido el cierre de tres o cuatro aulas, pero ya han vuelto a abrir y esperamos que el curso avance con normalidad.
La verdad es que en Miguel Esteban, donde más casos se están dando es en el ámbito familiar; y es ahí donde debemos incidir y pedir responsabilidad a los vecinos, para que sigan siendo prudentes y responsables. No podemos controlar las reuniones familiares, todos creemos que no nos va a pasar, que no pasa nada, pero luego está habiendo contagios entre hijos, padres y abuelos.
P. El inicio del curso político y la acción municipal también están siendo este año diferentes. ¿Cómo se presentan en Miguel Esteban?
R. Pues condicionados por la pandemia. Tenga en cuenta que los ayuntamientos vamos a tener menos ingresos de recaudación, pero los mismos gastos corrientes o de personal. Tendremos que seguir haciendo frente a lo mismo con menos dinero y eso nos obligará a gestionar, como en otras crisis, dando prioridad a lo más necesario y eliminando lo menos importante. Tendremos que apretar, por ejemplo, en festejos, en actividades deportivas, y en cosas que no sean prioritarias… Las inversiones, por otro lado, serán mucho menores; pues para nosotros lo más importante son las personas y a ellas destinaremos todo el dinero y recursos que podamos. Tendremos que seguir dando ayudas y colaborando con las pymes y los vecinos. Y lo haremos encantados.
Aún así, seguiremos adelante con proyectos que tenemos en marcha, como la remodelación del Ayuntamiento, cuya segunda fase vamos a iniciar próximamente. También hemos adjudicado ya la renovación de luminarias Led, con el ahorro que eso va a suponer para el pueblo; y tenemos previsto acabar la renovación de redes y la reforma de la calle Padre Joaquín, además de otras obras ordinarias y menores.
P. Dice usted que reducirán los gastos en festejos ¿Cómo se presenta la Navidad?
R. Pues de forma diferente, en familia, pero con familias reducidas… No nos queda más remedio que ser responsables y limitar las reuniones familiares si así nos lo indican.
En cuanto al municipio, pondremos algunas luces para dar alegría y esperanza a los vecinos y comercios; pero será una Navidad diferente, de abrazos y besos virtuales…
P. Para terminar, me gustaría que aprovechase para trasladar un mensaje a sus vecinos.
R. Quiero que mi mensaje sea de optimismo, aunque también de prudencia y cautela, por supuesto. Apenas quedan tres meses para terminar el año y debemos mirar al futuro desde el positivismo. No nos queda otra solución que ser ser responsables, tenemos que creer en el futuro, seguro que vendrán pronto tiempos mejores. Tenemos que sacar conclusiones positivas de esta pandemia. Hemos estado encerrados, estamos aprendiendo a vivir con el virus y a actuar con muchas medidas de prevención. Estoy convencido de que más pronto que tarde superaremos las dificultades, pero cada uno debemos aportar nuestro grano de arena para volver a disfrutar de la vida como antes.