Con el pregón que ayer pronuncio la conocida Alma María García, empresaria, profesora de baile y muy alcazareña, comenzaron ayer los actos de Carnaval en Alcázar de San Juan. Una fiesta que por segundo año se celebra bajo la declaración de Fiesta de Interés Turístico Nacional y que este fin de semana ofrece a propios y visitantes la oportunidad de presenciar sus dos grandes desfiles de comparsas, infantil (hoy sábado, a partir de las 5 de la tarde, si el mal tiempo no lo impide) y general (mañana domingo, también a partir de las 5 de la tarde).
El pregón de Alma María García convocó en el Museo municipal a un buen número de seguidores y amantes del Carnaval, así como a gran parte de la Corporación municipal y representantes de colectivos y asociaciones. Todos ellos tuvieron ocasión de hacer un recorrido por la historia de esta singular celebración, entendida en Alcázar de San Juan siempre de la mano de la Navidad. Así lo quiso subrayar la pregonera, quien, además de manifestar su orgullo por “pasar a formar parte del club selecto de todos aquellos que me han precedido como pregoneros”, destacó la gran responsabilidad y satisfacción que para ella ha supuesto dar el pistoletazo de salida al Carnavalcázar 2019, especialmente “porque es un reconocimiento a todas las veces que hemos participado durante tantos años en los desfiles, siempre intentando innovar y dar la mayor vistosidad posible; y a todas las ocasiones que hemos bailado y representado a Alcázar de San Juan allá donde vamos”.
Alma pronunció un pregón cargado de recuerdos, de vivencias de su infancia, de alusiones al Carnaval alcazareño de hace varias décadas, cuando el movimiento peñero se encontraba en pleno apogeo en Alcázar de San Juan y cada año, junto a sus familiares, participaba en las comparsas y actividades. Recordó especialmente al “Tiznao”, la ilusión con la que entonces sus componentes preparaban el carnaval, con trajes impresionantes, diseñados y elaborados a base de verdadero esfuerzo y dedicación (“cuando no existía la goma eva ni la silicona caliente”) y fue mostrando al público una muestra de aquellos impresionantes vestidos, con tocados de plumas y aderezos que no dejaban al público indiferente.
La pregonera también quiso hacer un recorrido por la amplia oferta de actividades que históricamente ha tenido el Carnaval de Alcázar, así como por las novedades que a lo largo de los últimos años se han ido incorporando, desde los grandes desfiles, con la elección del Obispillo en el caso de los niños, al desfile de mascaritas, verdaderas almas de estas fiestas hermanas de la Navidad. Habló, como incorporaciones, del propio pregón, de la ciclalgata o de los corros de mesas camillas que se celebran junto al duelo de la Sardina, el último día, uniendo en el calendario el entierro de tal señora con el día de los Santos Inocentes.
La alcaldesa, Rosa Melchor, por su parte, alabó a la pregonera y agradeció su participación, hablando de ella como de una joven empresaria, emprendedora, “que no ha tenido miedo de desarrollar su actividad, el baile, y convertirla en profesión aquí en su localidad, anteponiendo su alcazareñismo a cualquier otra condición; una persona que ha sido capaz de convertir su vocación en profesión, para crear y hacer escuela en su pueblo. Y eso es algo que hoy queremos reconocer, porque Alcázar es una ciudad que reconoce a sus hijos y Alma es un claro ejemplo de ese alcazareñismo que todos llevamos dentro”.
