![]()
![]()
Desplazado desde su lugar de residencia en el Puerto de Santa María, el alcazareño Antonio Leal, experto en Comunicación, Marketing y Publicidad, colaborador de El Semanal de La Mancha y autor de Encuentros en La Castelar, pudo por fin ofrecer el viernes por la tarde, en el Ateneo de Alcázar de San Juan, la conferencia que desde antes de la pandemia tenía programada, titulada "Una aproximación del Marketing a la Poesía". Un tema complejo abordado desde la magistralidad y experiencia que dan media vida en el mundo de la empresa como alto ejecutivo de una famosa multinacional (director de Marketing) y otra media vida como docente en las Universidades de Cádiz y Málaga (Leal es doctor en Ciencias Económicas y Empresariales, licenciado en Marketing y Publicidad y doctor en Ciencias de la Información).
La conferencia fue presentada por el poeta Mariano Lizcano, quien presentó a Leal como un experto en marketing, de currículum inmenso, referente en el mundo académico de la Comunicación y el Marketing". Un alcazareño que destacó también en el mundo de la empresa, donde ideó para Terry la imagen del anuncio de la bella amazona que cabalga en la playa sobre un caballo blanco, consiguiendo en pocos años que la compañía multiplicase hasta por seis sus beneficios. Agradecido a Leal, "por compartir con nosotros su sabiduría, conocimientos y cariño", Lizcano entregó al conferenciante un ejemplar de su poemario "Y me hice mosto y llanura hasta encontrarte".
Con los clásicos Demóstenes y Cicerón como punto de partida, con el teorema de Pîtágoras como marco de la relación entre el emisor y el receptor de un mensaje; y con obligada alusión al baloncesto, explicó a los presentes que tanto en Marketing como en Poesía "hay que transmitir lo que se siente". "No vale con ser mediocre, hay que ser el mejor", apuntó, y añadió la frase "si no estás consiguiendo lo mejor vas a encontrar lo peor" para señalar el camino hacia el fracaso, del cual, tal y como reiteró, deben siempre extraerse conclusiones y aprendizaje.
"El éxito o fracaso respecto al Marketing, como en la Poesía, se fija en la capacidad de transmitir, en los sentimientos". "El buen Marketing no es vender, es otra cosa, es entender cómo funcionan los mercados, cómo funciona la ley de la oferta y la demanda, y cómo funcionan las emociones. Igual que la Poesía, si leo un poema y no provoca en mí algún sentimiento es que no es un buen poema", dijo Leal, recomendando a los miembros del Ateneo que "sean diferentes a la hora de crear y capaces de aportar algo distinto".
Como herramienta fundamental, el dominio del lenguaje y de las formas, la lectura y la investigación como caminos hacia la eficacia, imprescindibles para llegar mejor al receptor del mensaje y transmitir contenidos, según Leal. Pero sobre todo, la capacidad de resistencia, "no hay que rendirse nunca para hacer realidad nuestros sueños", insistió.
"Las personas que luchan toda la vida son los imprescindibles", dijo en sincero recuerdo a sus padres y a su amigo poeta Santiago Ramos, fallecido en enero de este mismo año, en otro momento de la conferencia, mencionando entonces y enseñando en la pared un proyecto ideado con Poesía, Marketing y poemas de Santiago Ramos. "Imaginé un día la Castelar llena de poemas de Santiago Ramos", manifestó sin querer entrar en detalles (proyecto para dinamizar los escaparates con versos, decorar y unir estéticamente poesía y publicidad en los comercios, fomentar la poesía en la calle desde el punto de vista educativo y recordar al mismo tiempo a uno de los poetas más queridos de Alcázar de San Juan, presentado en su día a ASECEM, según ha sabido este medio de comunicación, con buena aceptación pero sin llegar a ejecutarse).
Como conclusión final, la necesidad de dotar de alma al Marketing, de aproximarlo a las emociones, a las sensaciones y a la Poesía. "Hace falta poesía por todos los lados... Y hace falta hacer marketing poeticamete", indicó.
Añadir que para finalizar Antonio Leal recibió de manos de Ángel Luis Agenjo, presidente del Ateneo, varios lotes de libros escritos por autores del propio colectivo, así como un atril de madera de recuerdo y otros obsequios.
![]()
