El hotel Ínsula Barataria de Alcázar de San Juan acoge en estos días una exposición de la pintora Inmaculada García Vallejo, herenciana de adopción y natural de Almadén. Una muestra formada por 19 óleos, que se presenta en cuatro bloques temáticos diferentes: detalles taurinos, escenas marinas, flores de amable colorido y retratos en gris (uno de ellos, merecedor de una mención especial en la última convocatoria del Certamen Nacional de Pintura Jesús Madero).
En la exposición, según explica la propia artista, "hay un poco de todo", diferentes motivos, estampas, objetos y personajes envueltos siempre de una gran luminosidad, colorido, dinamismo y profundidad.
"EL CUADRO TE VA LLEVANDO"
Maestra jubilada, amante de la pintura desde la infancia, autodidacta y "haciendo equipo" con su marido 
(también herenciano de adopción y fotógrafo creativo), Inmaculada confiesa que ha pintado "desde siempre". "Mi primer cuadro lo tiene mi tía en Villarrubia, tendría yo unos 13 o 14 años... Siempre he pintado, desde niña...Pintaba en las cajas de zapatos, en las revistas, en los espacios en blanco de los libros.. Pinto de todo... Empiezas con una idea y terminas con otra... El cuadro te va llevando", relata.
Una pasión y vocación que le han llevado a exponer en distintas ciudades de la geografía nacional y a contar con una colección casi innumerable de obras, óleos principalmente, pero también acuarelas, por las que asegura sentir especial predilección.
Una obra atractiva, variada e intuitiva, que podemos encontrar y adquirir en el Hotel Barataria de Alcázar de San Juan, gracias al empresario Pedro del San, herenciano de nacimiento, alcazareño de condición y amigo de la artista (todos los cuadros están a la venta, cualquier persona interesada puede preguntar en el propio Hotel).
