La diabetes es una enfermedad que se diagnostica cuando los niveles de glucosa (azúcar) en sangre superan unas cifras determinadas. Es una enfermedad muy común en la población, y es más frecuente a partir de los 65 años. Está causado por una secreción inadecuada de insulina por parte del páncreas, que es el órgano donde se produce. Puede no manifestar síntomas, o puede producir aumento de la sed y la cantidad de orina, o pérdidas de peso.
¿Por qué es importante la diabetes, su detección y tratamiento?
Porque puede producir, sobre todo en casos no bien controlados, complicaciones que afectan especialmente al sistema cardiovascular (infarto de miocardio, y trombosis cerebral), así como al sistema nervioso, riñón y órganos de la visión.
Controlar la alimentación. ¿Qué importancia tiene controlar la dieta?.
La alimentación es una parte fundamental del control de la diabetes y contribuye a retrasar o evitar la aparición de complicaciones. Comer dulces no es lo único que afecta en la salud de un diabético. El control de la diabetes depende en gran parte de los alimentos que tomamos; de la cantidad y la calidad. Siempre es bueno poner unos horarios fijos para comer, porque es aconsejable no pasar más de 4 horas sin tomar ningún alimento. Por otra parte, los diabéticos deben controlar los hidratos de carbono que están presentes especialmente en algunos alimentos (pan, arroz, pasta, dulces, frutas).
Esto no significa que no puedan comer dulces ni pasta, ni arroz por ejemplo; sino que se deben moderar las tomas y variarlos con otros alimentos. También es mejor tomar las comidas repartidas a lo largo del día y no en pocas tomas, para evitar los "picos de insulina", es decir, momentos en los que las concentraciones de azúcar se acumulan y hace empeorar el control a largo plazo. Mientras que si hacemos varias tomas, los niveles se regulan dentro de un margen más saludable. Aumentar las verduras y comer frutas en pequeñas cantidades a lo largo del día, facilitará evitar "subidones" de azúcar durante la jornada.
Ejercicio físico. ¿Los diabéticos pueden hacer ejercicio?.
El ejercicio físico por lo general es un buen aliado para el control de la diabetes, todo en su justa medida. La actividad te ayudará a mejorar el control de los niveles de glucosa, y el peso. La contracción muscular consume glucosa de la sangre y previene las complicaciones de la diabetes. Sus beneficios se producen a muchos otros niveles: mejora las cifras de tensión arterial, de colesterol y la función cardiovascular.
El ejercicio aeróbico es el más recomendable (baja intensidad, y larga duración) como caminar, bicicleta, patinar. Lo mejor es hacerlo de modo regular, a diario, y si se puede con aumento progresivo. Normalmente puedes comenzar con caminar 30 minutos al día; pero cuidado, porque el hacer demasiado ejercicio físico puede ser perjudicial, sobre todo si eres diabético, porque puedes tener alteraciones graves en los niveles de glucosa.
Hay que tener especial precaución por si hay una bajada de azúcar, para esto es muy útil llevar unos caramelos en el bolsillo por si de repente comienza a sentir mareos y sudores, puede significar que tiene una hipoglucemia, es decir, que debido al ejercicio físico ha bajado los niveles de glucosa disponibles en sangre. Esta situación se corrige tomando de inmediato azúcar (caramelos, zumo) que corrige la bajada y hace recuperar el desmayo.
Dr. Angel Luis Laguna Carrero
Médico especialista de área Urgencias. Medicina Familiar y Comunitaria. Máster de Urgencias y Emergencias.
