Partidazo con Mayúsculas el que se pudo presenciar el sábado en el Díaz-Miguel. Bajo un grandioso ambiente con dos tercios del pabellón cubiertos, llevados a ritmo de charanga, que no paró en animar, alentar y apoyar a los suyos, el Racing de Alcázar logró…el más difícil todavía y consiguió darle la vuelta a un partido que se le puso muy, pero que muy cuesta arriba 0-2.
Los de Isidro García se encontraron con un rival, que vino a Alcázar a plantear un partido, duro, trabado, muy físico, cómo si se jugarán la liga. Además, a los alcazareños no les entraba nada o mejor dicho, el portero toledano lo paraba todo, pero todo y además de forma espectacular. Tras varias ocasiones locales con sendos disparos de Muela, Jaime Gómez, que el portero detuvo con muchos reflejos y aciertos.
A los siete minutos, los visitantes se adelantaron en el electrónico y al borde del descanso ponían un peligroso 0-2, que presagiaba lo peor. Los alcazareños lo intentaron y dispusieron de muchas ocasiones para acortar distancias antes del final de la primera mitad, pero no tuvieron acierto ni suerte y además el portero toledano estuvo de diez.
Tras la reanudación, los visitantes tuvieron un disparo al larguero para haberse puesto 0-3… Pero, el Racing de Alcázar, no se descompuso, ni tampoco se vino abajo, creyó y confió en la remontada y con una fe enorme se puso manos a la obra para, primero acortar distancias con un gol de Musta a los cuatro minutos de la reanudación 1-2.
Cuando parecía que podría llegar el empate, los toledanos, volvieron a aumentar su renta con el 1-3 y a partir de ahí, los rojiblancos, aumentaron su ritmo, sometieron físicamente a su rival. Chus sacó de la misma línea de gol el 1-4 que podría haber roto por completo el partido…, y tres minutos después, Álvaro Muela con una “picadita” puso el 2-3 de la esperanza, el que levantó al público de sus asientos y presagió tintes de remontada.
Quedaba mucho por jugar, y cinco minutos más tarde Musta, a la media vuelta, hizo el gol del empate a tres. Había que sufrir y mucho, aunque de nuevo Musta a 3:24 para el final lograría el 4-3 que pondría, por primera vez por delante a los rojiblancos en el electrónico. Pero poco le duró la alegría a los alcazareños, ya que 23 segundos más tarde, Menasalbas, con juego de cinco y portero-jugador, conseguiría el gol del empate a cuatro. Quedaban 3:01 para el final, era el día…, no se podía fallar, estaba en juego la posibilidad de seguir vivo en la lucha por el ascenso a Tercera, el pabellón estaba a reventar, con un auténtico ambientazo, gracias a los históricos campeones de las ligas locales en 1ª División de Alcázar de San Juan…que disfrutaron de lo lindo.
Y Rápidamente Jaime Gómez, completó la remontada final con un 5-4 a falta de 1:37 para el término del partido, que levantó al público de sus asientos para festejar una gran victoria que dejó muy satisfecho al público, en perfecta comunión con su equipo, y a un Racing de Alcázar que dio un pasito más hacia su objetivo de ascenso a la Tercera División. Eso sí, el Menasalbas tuvo el gol del empate en un disparo de Javier Vaquero sólo en el segundo palo, tras acción ofensiva de portero-jugador que envió al techo del Díaz-Miguel.
Al final, fiesta en la pista y en la grada para celebrar una gran victoria, en un partido de los que hacen afición y que será recordado por todos los presentes. El próximo domingo a las 12:30 horas, el Racing de Alcázar se desplazará hasta Santa Cruz de Mudela para medirse a La Abuela Cándida/FS Santa Cruz, rival directo por los puestos de ascenso.
