La transmisión de microbios

Por Andrés Manzaneque. Enfermero jubilado e Hijo Predilecto de Alcázar de San Juan

Treinta y dos millones de microbios en un apretón de manos En los actos cotidianos de la vida nos pasamos el tiempo intercambiando microbios con el resto de las personas.

Veamos ahora tres ejemplos de “trueque” juzgados, sin embargo, inofensivos

El apretón de manos

La cantidad de microbios que se encuentran sobre la piel “limpia” o “casi limpia” de las manos es de aproximadamente 100.000 por cm2. Así, cuando un apretón de manos a otra persona, estamos poniendo en contacto a 16 millones de microbios de nuestra mano con los 16 millones de microbios de la mano de la otra persona saludada. Muchos más si, además, uno u otro tiene las manos sucias.

El beso

Al compañero o compañera en pleno boca o es menos “productivo” en cuanto a la propagación de microbios, puesto que la población microbiana de la boca es de “1 millón por cm2”. Así, el contacto de los labios y la lengua pone a su vez en contacto 42 millones de microbios por ambas partes.

El amor

En el acto sexual, el pene, recubierto de 17 millones de microbios, se aloja en la vagina, donde la población microbiana, razón de 10.000 millones por cm2, hace un total de dos billones de microbios, después, cuando el hombre eyacula libera en el interior de su compañera 100.000 microbios más por milímetro de esperma, es decir, un total de 300.000.

Precisemos, sin embargo, para no sembrar el pánico, que los microbios son indispensables para la vida, y que existen microbios “buenos”, por ejemplo en el tubo digestivo, donde se encargan de de degradar los alimentos, y “malos”, que son los que provocan las enfermedades. Buenos y malos, los microbios son intercambiados y si el organismo no se encuentra suficientemente “armado” biológicamente para combatir a los malos… el cuerpo receptor hereda una enfermedad.

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