AFORISMOS, GREGUERÍAS Y OTRAS ESCRITURAS. LA LISTA MÁS “BOTADA”

 

 

Tengo mi propia lista que botaré el 23-J. No diré los nombres pero muchos están en el imaginario de cualquier votante conocedor de la realidad política de nuestro país. Y sí, son esos a los que me refería en una entrega anterior: los que mintieron, medraron, se enriquecieron, prevaricaron, trajeron división y avivaron odios y rencores. Son los arribistas de siempre, eviternos aventureros de la política. Vade retro.

Ligeratura: La que se hace cuando se escribe a la pata la llana, sin el debido respeto a las reglas de la preceptiva literaria.

Cerrorista: Que comete atentados en los cerros próximos a las ciudades (los de Úbeda y los de otras poblaciones).

Guiri gay: Individuo europeo, principalmente británico, que une a su condición de turista la de pertenecer al colectivo lgbt.

Cosas de números: El 9 es la clave de fa a la que olvidaron colocar los dos puntos que la identifican en el mundillo de los pentagramas.

Prohibilegios: Beneficios, bicocas y regalías que conllevan ciertos cargos que deberían estar prohibidos –los chollos, no los cargos– por su origen casi siempre irregular.

Barruntar: Untar barro en la rebanada a falta de mantequilla, margarina, mermelada o cualquier otro producto untuoso. Se usa como metáfora de pobreza en las colas del hambre.

Matriculosis: Infección monetaria que se contrae cuando se paga varias veces una matrícula por repetición de curso.

Optomentira: La cometemos cuando aseguramos que vemos las letras más pequeñas pero solo distinguimos un borroncito blanco o negro, según el fondo.

Aquel agente de espectáculos musicales traficaba con piernas preciosas.

Privilejos (o no tanto): Beneficios, bicocas y regalías a los que aspiran los recién llegados a la política.

Iberdroga: Sustancia dopante en pastilla u otro formato que ha sido fabricada en España y ostenta la oportuna denominación de origen.

Se dice (y se cree) que el futuro de los pueblos está escrito en los astros, y no es verdad. El futuro de los pueblos ha de escribirse de tiempo en tiempo con nombres y apellidos en las urnas.

Del libro inédito “Aforismos, greguerías y otras escrituras”

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