Sobre el conflicto en la franja de Gaza

Desde la madrugada del sábado 7 de octubre estamos siendo testigos de la enésima escalada en el conflicto que se lleva desarrollando desde hace 75 años en Palestina. Una guerra de ocupación militar que lleva sufriendo el pueblo palestino, totalmente asimétrica, y en la que el Estado de Israel aplica siempre una fuerza desproporcionada en la respuesta ante las acciones de los diversos grupos y milicias palestinas.

Esta vez la ofensiva se ha iniciado desde la Franja de Gaza, una de las dos zonas en que ha quedado dividido el territorio palestino después de las numerosas invasiones y usurpaciones territoriales por parte de Israel. Gaza se ha convertido, desde hace mucho tiempo, en una enorme cárcel al aire libre en la que viven hacinados 2’4 millones de palestinos y palestinas, sin acceso a las mínimas condiciones y servicios que permiten una vida digna, por decisión y responsabilidad única y exclusivamente del Estado israelí, que ha impuesto un bloqueo por tierra, mar y aire sobre la Franja de Gaza desde el año 2007, que ha generado una situación de emergencia humanitaria.

Ante la declaración de estado de guerra por parte de las autoridades israelíes por primera vez desde 1973, recordamos el derecho a la resistencia que tienen los pueblos bajo ocupación, tal y como le ocurre al pueblo palestino desde hace 75 años.

El ejército israelí ya ha puesto en marcha nuevos ataques aéreos sobre la Franja de Gaza, que son una nueva violación del derecho internacional y las resoluciones de la ONU. Así mismo, Israel ha aplicado desde el lunes 9 de octubre una estrategia de cerco total a la Franja para impedir la entrada de alimentos, combustible o electricidad, en lo que distintas voces han calificado como un “castigo colectivo”, que a su vez constituye un crimen de guerra, según el derecho internacional.

La única solución al conflicto es que la comunidad internacional garantice el cumplimiento por Israel de las distintas resoluciones sobre territorios ocupados que lleva incumpliendo sistemáticamente, garantizar el derecho de Palestina a ser un Estado soberano e independiente y poner en marcha, de inmediato, un proceso de paz que garantice el final del conflicto armado.

Por ello, frente a las declaraciones que ya justifican un nuevo ataque de Israel a gran escala, desde la asamblea local de Izquierda Unida de Alcázar manifestamos lo siguiente:

1.    Reafirmamos nuestra solidaridad y apoyo a las palestinas y a los palestinos, que cada día resisten la ocupación, el apartheid y el exilio.

2.    Condenamos firmemente la guerra de ocupación que ejerce Israel contra Palestina, así como el asesinato de civiles por parte de cualquiera de los bandos, incluida la acción ejecutada por Hamás el pasado sábado 7 de octubre contra ciudadanos y ciudadanas israelíes.

3.    Exigimos el cumplimiento de las resoluciones de la ONU y el reconocimiento de las fronteras establecidas en 1967, frontera internacionalmente aceptada.

4.    Instamos al gobierno de Castilla La Mancha a enviar ayuda humanitaria a la población palestina en la Franja de Gaza, que está sufriendo la brutal represión israelí y no cuenta con el acceso a los productos básicos.

5.    E instamos al Gobierno de España al reconocimiento del Estado de Palestina, con todas las consecuencias, y a mediar a nivel internacional para poner fin a la guerra que ha declarado Israel contra la Franja de Gaza.

Más en Opinión
Entrando en la página solicitada Saltar publicidad
Advertisement