No hay fiesta que se precie, que no se celebre comiendo, bebiendo, charlando con los amigos y conocidos, las fiestas suelen ir siempre acompañadas de estos ingredientes, que en este pequeño artículo vamos a desarrollar como uno de los elementos dinamizadores de nuestra Feria y Fiestas.
Las demostraciones gastronómicas han ido creciendo a lo largo de todos estos años, cambiando de ubicación, de espacio siendo a día de hoy incluso matinal y nocturno, a las tradicionales zurras, gachas, pisto y migas se le han ido añadiendo multitud de elaboraciones que hacen las delicias de los comensales oriundos y foráneos. También la participación ciudadana a través de diferentes asociaciones y colectivos locales han hecho, que cada año vayan creciendo en su volumen personal como en variedad de degustaciones, incluyendo este año las Tortas en Sartén con la participación de la Hermandad de San Antón y el Asadillo con la Asociación Española contra el Cáncer, en definitiva una amalgama de sabores que se mezclan y que hacen el disfrute de quien lo degusta.
A las grandes chocolatadas que se hacían en los años 70 del siglo pasado para niños y niñas, catas de vinos para personas mayores, la gastronomía en general en esta época corría, más a cargo de los puestos de las ferias, donde era muy común feriar una barra de salchichón o algún alimento o utensilio que fuera necesario para la casa en cuestión, luego fueron sustituyendo por peladillas, manzanas glaseadas, trozos de coco y el turrón, entre otros elementos que se solían comprar y se echaban de ferias, costumbres que algunas veces todavía perduran y que en alguna casa es tradición de comprar algo en época de Feria.
La primera degustación documentada que se produjo en Alcázar de San Juan, se realizó el domingo 6 de septiembre de 1981 a las 13h en la plaza de España, en estos momentos se iniciaba el primer concurso de Zurra, al que le siguió el día 8 de septiembre en la plaza de Santa María el concurso local de Migas de Pastor, es el inicio de lo que hoy conocemos como demostraciones gastronómicas, se solía hacer la Zurra hacer frente a la fachada del Ayuntamiento en la zona donde daba la sombra, siendo en un primer momento como decimos concursos con tres premios en metálico.
En 1984, tres años después, a las 2 de la madrugada se produciría el primer concurso nocturno de Gachas , como dato curioso, el año que viene cumplirá esta demostración los 40 años de existencia. En esta época los concursos gastronómicos estaban muy unidos, casi siempre a la gran fiesta popular, que distintas orquestas realizaban amenizaban esa misma noche en la Plaza de España. A la que se le unió en 1986 el primer concurso de Pisto Manchego a las 5 de la mañana, también celebrado el día 8 de septiembre de madrugada, hoy se hace el 4 de septiembre. Y el de Ensalás de Limón también se uniría este mismo año de 1986.
Como decimos, en primer lugar nacen como concursos, con premios en metálico de 6000, 4000 y 2000 pesetas repartidas en primer, segundos y terceros respectivamente. También en el año 1987 se le unía el concurso de Guisado de Carne de Lidia. Este año se empezaba a constituir las demostraciones como las conocemos ahora, ya que se podían inscribir hasta 20 cuadrillas, aunque los grupos eran más cortos que las de hoy en día, ya que como máximo solo podían estar cuatro personas por grupo.
Para animar a la gente a participar, el ayuntamiento en 1987 para el concurso de Ensalás de Limón subvencionaba con 500 pesetas, para el zurra con 22 cuadrillas, les facilitaba los ingredientes vino, azúcar, agua y limón, obligando a los concursantes a utilizar el vino en su totalidad. En las migas se ponía como máximo dos panes por cuadrilla y en este caso los participantes llevaban todo y el ayuntamiento subvencionaba con 500 pesetas. Para las gachas la subvención era de 400 pesetas, al igual que el pisto. La Carne de Lidia se repartía a 5 kg por cuadrilla, los ingredientes y utensilios a cargo de los participantes.
No sería hasta 1988 cuando se eliminó el concurso y el ayuntamiento subió la cuantía de la subvenciones a 1000 pesetas para la Ensalá de Limón, a 1500 pesetas para las gachas, pisto y migas de pastor.
En el año 89 se ponía la primera iluminación a un monumento alcazareño como es el Torreón, siendo las demostraciones gastronómicas las mismas que en el año anterior, aunque la cuantía de la subvención municipal fue cambiando a lo largo de los años, según necesidades y como siempre según presupuesto existente.
Las ubicaciones también fueron cambiando, de la plaza se fueron a los aparcamientos de la Piscina municipal en los años 90, Plaza del Altozano, Avenida de la Constitución, Avenida del Deporte, Calle La Feria, hasta la zona de la Serna o conocido como Ciudad Jardín que es donde se realizan en la actualidad sobre todo las más multitudinarias otras se siguen manteniendo en la Plaza este año recién arreglada.
En 1998 aparece documentada la primera asociación que colaboró en la Ensalá de Limón fue la hermandad de Donantes de Sangre, hoy en día son muchas, como la Peña Flamenca, Cruz Roja, Coros y Danzas, Amas de Casa, FAVA que llevan varios años participando y otras muchas más que han participado y ya no lo hacen, y otras muchas que se incorporan en los últimos años a colaborar en lo que haga falta.
En 1999 al igual que se iniciaba el Baile del Vermut, se unía una nueva demostración gastronómica como es la Pipirrana que este año nacía junto a la Carne de Lidia, pero que al año siguiente se separarían cada demostración por su lado.
En 2001 se unió el Machacón en la plaza de España y al año siguiente en 2002 se empezó a realizar lo que hoy se conoce como la Noche de la Convivencia. A la comida tradicional manchega, se la unía el Plátano Verde, Sarmale Rumano, el Plátano Maduro , también este año aparecía como novedad una Sardinada y se empezaban a realizar las demostraciones nocturnas en la Avenida del Deporte.
Al año siguiente la noche se llamó Noche de la Solidaridad y al Sarmale de Rumanía se le unió el Ceviche de Ecuador, Empanadas de Colombia y Melfof de Marruecos, a la que luego se le unió comida Boliviana entre otros países. Y se empezaron hacer homenajes a distintas asociaciones locales, por lo que estas empezaron a participar más activamente en las diferentes demostraciones gastronómicas. En 2004 se añadieron los Duelos y Quebrantos, en la noche homenaje a los mayores y también se hizo este año La Sardinada ofrecida por el Centro de Mayores de Santurce.
En 2006 en la plaza de Santa Quiteria, se hizo el día 8 de septiembre una degustación de una paella gigante ofrecida por la Asociación de Feriantes. Y en el 2009, se empezó a desfilar los gigantes y cabezudos que conocemos ahora y que se representan personajes relacionados con la historia de la ciudad.
También desde el año 2001 la corporación municipal obsequia a las personas participantes en las demostraciones gastronómicas con piezas de alfarería tradicional, en su mayoría realizadas por la familia Peño de Villafranca de los Caballeros, que hacen el deleite del personal y ponen en valor este oficio y este patrimonio como es la cerámica de la zona.
Entre la variedad de piezas obsequiadas se encuentran Botijas de Alcázar y de Villafranca, Trompas de barro, Cántaros, Botijos, Lebrillas, Cantimploras, Pucheros, Jarras, Bacías, Ensaladeras, Orzas, etc. Este año se ofrece una Alcancía, una hucha de las antiguas, que aunque estas fiestas son para disfrutar lo que se pueda, nos manda un pequeño mensaje, de que hay que ahorrar, con un hondo recuerdo de nuestros mayores que guardan en esa memoria colectiva lo que tan inteligentemente supieron hacer en otras épocas de carestía. Felices Feria y Fiestas 2023.
