“La autoestima no es tan vil pecado como la desestimación de uno mismo”. (W. Shakespeare). Por eso algún político de este tiempo quiere pasar a la historia en formato imágenes por más que su difusión esté resultando harto dificultosa.
Ingeniosis: Ataques de ingenio que suelen padecer los creadores (músicos, escritores, pintores, cineastas, etc.) que aprovechan para sacar lo mejor de sí mismos y alumbrar sus mejores obras. Se da más en edad avanzada.
Desensueño: Cuando se estaban soñando cosas dulces y de repente suena el despertador.
El escritor escribe cartas más o menos largas a un destinatario desconocido llamado lector.
Cartongrafiar: Trazar el mapa de cualquier superficie sobre cartón en lugar del papel o pergamino habituales.
Electra: Hermana de Orestes y madre de Iris y de las Harpías. Estaba muy delgada de tanto dar a luz. El coste de sus servicios solía ser más barato en torno a las 2 o las 4 de la tarde en las llamadas horas valle.
Hipoacusica: Sin llegar a imputar a alguien alguna culpa o acción vituperable un poco chivato/ a sí que lo es.
Cerebrosis: Enfermedad que consiste en la induración de las circunvoluciones cerebrales. Se secan las ideas y de ahí ya no sale nada de provecho. La padecen algunos políticos cuando llevan mucho tiempo en el cargo.
Amicidio: Cargarse alguien a un amigo más o menos intencionadamente.
Hipocrecía: Esa alteración respiratoria manifestada en el movimiento convulsivo del diafragma iba en aumento.
Frascotirador: El que cada noche, cuando no lo ve nadie tira los frascos vacíos al contenedor del vidrio.
Raquético: A pesar de su extrema delgadez, aquel tenista dominaba la raqueta como nadie y ganaba todos los sets.
Hombresía: Es la capacidad por la cual el niño se convierte en hombre. Es un proceso natural ajeno a ambos.
(Del libro inédito Aforismos, greguerías y otras escrituras. Más de 1800 textos breves para sonreír y reflexionar).