El Proyecto Geoparque “Volcanes de Calatrava. Ciudad Real” se someterá del 7 al 11 de agosto a la evaluación de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). Así lo ha anunciado esta mañana Miguel Ángel Valverde Menchero, presidente de la Diputación provincial, institución que viene trabajando para lograr una calificación favorable que contribuya no sólo a poner en valor nuestro pasado y presente geológico, sino también a revitalizar nuestro territorio, porque constituye una herramienta para el impulso de la actividad económica, turística y cultural.
En estos términos se ha expresado esta mañana Valverde, quien, acompañado por la vicepresidenta responsable de la gestión del proyecto, Sonia González Martínez, ha expresado “el alto interés” del Equipo de Gobierno en que el Geoparque salga adelante. “Vamos a poner todos los apoyos y medios para que la declaración sea posible”, ha dicho antes de comentar que la evaluación, que correrá a cargo de dos inspectoras de la UNESCO, es determinante para que el trabajo previo culmine en el sentido que todos esperan.
Ha indicado, a este respecto, que se ha llevado a cabo con un adecuado rigor científico, lo que ha permitido presentar un proyecto que demuestra la importancia geológica de nuestro territorio. En 2022 se presentó la candidatura a la Comisión Nacional Española de Cooperación ante la UNESCO y en noviembre este órgano remitió a la UNESCO una carta de apoyo al Geoparque “Volcanes de Calatrava. Ciudad Real”.
Valverde ha explicado que el proyecto gira en torno a tres acontecimiento geológicos clave. Por un lado la erupción volcánica que se registró en Almadén hace 450 millones de años, que dio lugar a la mineralización del mercurio, que tanta riqueza proporcionó al territorio y que ha sido de vital importancia para la economía de nuestro país. Además, el mercurio de Almadén e Idria mereció la declaración de Patrimonio Mundial de la UNESCO como uno de los 100 primeros lugares geológicos de todo el mundo.
La segunda localización es Puertollano, donde erupciones volcánicas originaron nubes de ceniza que fosilizaron la vegetación y los vertebrados como ocurrió en Pompeya, dando lugar a la aparición paleobotánica del carbón en la ciudad industrial. Y el tercer eje se conforma en torno al Campo de Calatrava, donde se localizan volcanes neógenos que tuvieron su actividad hace 7'5 millones de años.
Ha señalado que es un vasto territorio que presenta una dispersión de 350 vestigios volcánicos entre maares, baños, hervideros y fuentes agrias, todas ellas manifestaciones derivadas de las múltiples erupciones volcánicas que se registraron en el pasado.
Acreditar el interés geológico y el pasado volcánico es importante para Valverde, pero también lo es que se tome conciencia del patrimonio natural y cultural que atesora el territorio que se somete a evaluación, un total de 4.832 kilómetros cuadrados. Ha añadido que se pondrán también en valor los yacimientos arqueológicos, castillos, santuarios y ermitas, así como nuestra gastronomía.
Complementar, no anular ni solapar
Con respecto al plan de sostenibilidad asociado al proyecto, ha adelantado que en los próximos días se firmarán convenios para desarrollar el Museo de la Minería y el Parque de Turismo Activo del Pompeya Paleobotánica Carbonífera en Puertollano y en Almadén se impulsará la Asociación Museográfica de la Sala Expositiva de la Escuela de Ingeniería Minera e Industrial. Estas y otras actuaciones contribuirán al desarrollo de las economías locales. Valverde considera que es una estrategia adecuada siempre que las iniciativas que se lleven a cabo complementen o implementen las estrategias de desarrollo de las comarcas afectadas, que no las anulen ni las solapen.
Durante el proceso de evaluación se van a producir encuentros con interlocutores de los territorios afectados, como es el caso de instituciones como la Junta de Comunidades y los ayuntamientos, de agentes sociales y de representantes de la hostelería y del turismo. Del mismo modo, se producirán contactos con los grupos de desarrollo rural Valle de Alcudia, Campo de Calatrava, Entreparques y Montesur. Además, las inspectoras evaluadoras, la noruega Cristine Ranger y la irlandesa Martina O´Neill, tendrán la oportunidad de realizar visitas a Ciudad Real, Almadén, Puertollano, a la aldea de Almodóvar de La Bienvenida, Villamayor, Poblete, Alcolea, Almagro, Aldea del Rey, Pozuelo, Granátula y Carrión.
Serán cuatro intensos días de evaluación y emitirá un informe que no es vinculante, pero sí decisivo para decantar el sentido de la declaración final, que se producirá a finales de 2023 o principios de 2024.